14 / julio / 2019

¡Quiero aprender a tocar la batería!

¡Quiero aprender a tocar la batería!
Vale, bien! ¿Pero cómo lo hago?
¿Me compro una batería directamente?
¡Con el ruido que hace, no voy a poder practicar en casa! Ya verás los vecinos…
¿Puedo aprender a tocar con una batería electrónica?
¿Y si luego descubro que no es lo mío?
¿Y si no se me da bien?…

Estas son dudas reales que nos llegan desde hace tiempo por parte de alumnos o de padres de los alumnos más jóvenes.
Hemos decidido recopilarlas para que nuestro profesor de batería Pedro Cuevas nos ilumine con respecto al tema.

Pedro nos cuenta lo siguiente:

Pedro Cuevas, Profesor de batería

Pedro Cuevas
Profesor de batería

Por mi experiencia personal no recomiendo comprar una batería antes de comenzar con las clases. Empezar a tocar un instrumento desde cero requiere su tiempo, hay que tener paciencia y trabajar desde el primer día los aspectos más vocacionales.

Muchos de los ejercicios que realizamos en las primeras clases son para trabajar la coordinación, y algunos de estos se pueden trabajar en casa sin necesidad de tener una batería. Sí es imprescindible tener baquetas para familiarizarse con ellas y hacer ejercicios de muñeca, entre otros.

Yo como profesor, desde las primeras clases trato motivar al alumno con ritmos de canciones que le gusten, y ya una vez superada esa primera fase de adaptación entramos en temas de técnica.
Es entonces cuando se recomienda comprar o conseguir una batería, para poder practicar y así aprender a buen ritmo.

Hay varias opciones:

El que pueda comprarla porque tenga espacio en casa y no moleste a los vecinos, que la compre. Nueva o de segunda mano, tener una batería «real» siempre es lo más recomendable.

Otra opción son las baterías electrónicas, no hacen ruido y ocupan menos espacio.

Y otra opción, quizá la más económica sería conseguir compartir una batería en un local de ensayo. En nuestra escuela somos una comunidad de músicos, por lo que si tenemos oportunidad ponemos en contacto a unos alumnos con otros para que sus bandas puedan compartir locales de ensayo.

En definitiva, hay muchas posibilidades, cada alumno y sus circunstancias son diferentes y cada profesor tiene sus propias maneras.

Yo, por mi experiencia, esto que os cuento es lo que recomiendo a los alumnos y alumnas que quieren empezar a tocar la batería.